Hubo un estado de excepción en Brasil

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Hasta hace poco no había dudas sobre el estado de excepción que se inició en 1964 en Brasil. Pero varias voces de autoridades han comenzado a relativizar o incluso a negar la muy dañina y duradera dictadura por la que hemos pasado. Incluso hay quien ha vuelto a utilizar la expresión «revolución» para decir que no hubo golpe de Estado en 1964.

Para refutar cualquiera de estas absurdas afirmaciones, basta con observar que todo el Golpe se produjo efectivamente con una sesión legislativa, el 2 de abril de 1964, que declaró la vacante de la Presidencia de la República. Por esta misma razón, hay quienes afirman que la fecha del Golpe no es ni el 31 de marzo ni el 1 de abril, sino el 2 de abril de 1964. Pues bien, tras la declaración de vacante hubo infinidad de actos administrativos/legislativos que pretendían apoyarse en la legislación brasileña, pero que sólo podían tener alguna validez formal por esa declaración de vacante. Incluyendo la toma de posesión de los sucesivos generales en la Presidencia.

Sucede que en 2013 el Congreso Nacional aprobó una Resolución (Nº 4 de 2013-CN, publicada el 29 de noviembre de 2013 en el DOU) que deja sin efecto esa sesión legislativa y, en consecuencia, la declaración de vacancia. Legalmente, esto significa que no hay legitimidad en todos los actos que siguieron. Esta es una prueba definitiva e irrefutable de que en 1964 hubo un golpe de Estado en Brasil, seguido de un período de más de veinte años de estado de excepción, ya que no hubo normalidad democrática ni siquiera en las tomas de posesión presidenciales.

El Estado de Derecho democrático se restableció, sin lugar a dudas, con la promulgación de la Constitución Federal de 1988, aunque los gobernantes militares terminaron su ciclo en 1985.

Es muy importante recuperar esta decisión del Congreso Nacional que sacramentó de una vez por todas la verdad de que había un estado de excepción en Brasil desde 1964.

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